Alí Primera guerrero de canto y palabra
> Su voz incendiaria recorre cada rincón de la Patria y sobrepasa nuestras fronteras elevando las banderas del antiimperialismo
Por el año 1979 salía a la luz el disco Canción Mansa para un Pueblo Bravo, en él Alí decía: “Creo en el canto, porque el hombre es indivisible en sus partes revolucionaria y humana. Porque a la lucha debemos ir de buena gana y sin amarguras”. Estas palabras definen ese espíritu que fue y sigue siendo Alí Primera, un guerrero cantor, un cantor guerrero. A los 31 años de su siembra su canto vive en cada vereda, en cada cuadra, en cada plaza, en cada hogar venezolano, incluso más allá de nuestras fronteras.
El 31 de octubre de 1942 en el viejo hospital de maternidad Oscar Chapman de Coro, estado Falcón, nace Alí Primera. Su vida se inicia con una tragedia, la muerte de su padre, cuando tenía tres años de edad. En una entrevista relata aquello: “Mi padre era policía… un día que estaban jugando dominó en la cárcel, este preso que tenía un pique con el jefe de la policía, tomó de la habitación de uno de los policías su arma. Entonces le disparó al jefe y lo mató, también a otros policías; los que estaban jugando dominó salieron corriendo pero como el preso con el arma en la mano también estaba asustado siguió disparando y un tiro le dio a mi papá en el costado. A los ocho días mi papá murió y el preso estuvo llorando por mi papá porque aun siendo policía era muy querido por sus compañeros”.
En medio de tanta pobreza, junto a sus hermanos, le tocó bregar desde temprano como vendedor de dulces, empanadas y de limpiabotas. A pesar de la aridez del paisaje y la sequía brutal que le arrimaba el infortunio, no impidieron que fuera brotando el canto y con él lo fuera despistando.
Tal como afirmara años después en una entrevista a Ofhelly Figarella en la revista Venezuela Farándula: “Mi canción no es de laboratorio, yo respeto y acudo mucho a la vivencia: si tengo cierta capacidad de transformar esa vivencia o por lo menos hacerla accesible desde el punto de vista musical a los seres que me rodean, yo me siento contento”.
Iniciando la década de los 60 se trasladan a Caracas, allí culmina sus estudios de bachillerato e ingresa a la Universidad Central de Venezuela a estudiar química en la Facultad de Ciencias. Aunque no culmina la carrera, la vida universitaria le permitirá afianzarse como músico pero primordialmente, le ayudará a tener una mejor visión de la situación política del país y de la lucha armada que miles de jóvenes llevaban a cabo contra la pseudo democracia adeco-copeyana que hundía en la miseria y la masacre a los venezolanos.
En medio de estas vivencias se comienza a templar el acero del artista que va de la mano del pueblo. El cañón de su canto empieza a apuntar directamente en contra del imperialismo y sus lacayos que repartían las tierras y el petróleo del país a los gringos, como bien lo reza en su canción Ahora que el petróleo es nuestro: “Nosotros lo trabajamos,/ nosotros lo refinamos/ señores a esa comedia/ la gracia yo no le veo/ que nosotros trabajemos/ y ellos con el mercadeo…”
Alí fue siempre un artista integral, consecuente y orgánico, que asumió la lucha no solo desde su canto. En cada presentación, bien fuera un concierto o entrevista expresaba su convicción, sin medias tintas. En el año 78 brindó su apoyo a la campaña electoral de José Vicente Rangel, cuando este optaba por la presidencia de la república. “Yo siempre he apoyado a José Vicente. Porque yo no creo en la campaña electoral, sino en una campaña social”, repetía en los conciertos que dio por todo el país.
En el primer Festival de Nuevo Canto en 1982, en México, dejó clara su visión de artista: “Yo creo que el arte es el arte; debe haber una conducta típica y debe haber una conducta militante con respeto al arte. Si el artista es muy sublime, es muy excelso, es muy alto, su arte es como es el artista, pero si además el artista con todas esas características se vincula militantemente al proceso transformador, su arte es más arte, no se mancha el arte, recupera más camino el arte”.
Esa militancia lo llevó a correr grandes peligros no sólo contra él, sino contra sus familiares y amigos, Alí fue siempre blanco de los organismos represores de la Cuarta República, su hijo Servando, en una entrevista ayer para Ciudad CCS Radio reflexionaba: “Luego entendí que más de siete veces, antes de que dieran con su muerte, ya habían pasado siete oportunidades para que a él se lo llevaran en atentados contra su vida, porque él le cantaba a la vida, porque él le cantaba a otra idea de reconstruirnos como sociedad”.
Escuche declaraciones de Florentino Primera para Ciudad CCS Radio
El 16 de febrero de 1985, después de una grabación de lo que sería su último disco, tiene un accidente de tránsito en la autopista Valle Coche y parte físicamente.
A pesar de la censura a la que fue objeto años después de su muerte, su canto rompió con el velo y hoy retumba junto a su palabra viva: “No tendré peso político para tumbar gobiernos, pero carajo, a mí nadie me quita el pálpito de que aquí el pueblo alguna vez será gobierno”.
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Marcha de los claveles rojos
Cada año, luego de conmemorarse la muerte del Cantor Alí Primera, el pueblo venezolano concurre en una larga caminata, con una flor en la mano, a la tradicional Marcha de los Claveles Rojos, en la Península de Paraguaná, estado Falcón, tierra que vio nacer a este creador.
Esta actividad se inicia el fin de semana siguiente al 16 de febrero de cada año, con un sentido encuentro entre familiares, amigos, poetas, cultores y cultoras, que asisten a una amplia programación que incluye conciertos, recitales, talleres, foros y charlas.
El foco central de los actos se realiza en la Fundación Casa Museo Alí Primera, en donde el público asistente puede hacer un recorrido a partir de una muestra museográfica compuesta de fotografías, instrumentos, objetos personales, entre otras piezas cercanas a Alí Primera.
Existe una programación diversa para todas las edades, en esta ocasión se estará realizando un concierto el sábado 20 a las 6:00 pm en las adyacencias de la Casa Museo y culmina el domingo 21 con un recorrido que parte desde el barrio Alí Primera, en la caminata el pueblo va entonando sus canciones de manera continua hasta el cementerio municipal, lugar de su siembra. Allí, durante varias horas, los diversos cantautores que asisten interpretan sus canciones y depositan sus ofrendas.
CARLOS MANUEL DUQUE / CIUDAD CCS
Efraín Cortez
“No te dejes engañar, cuando te hablen de progreso, porque tú te quedas flaco y ellos aumentan de peso” Alí Primera, y parafraseando la expresión de Alí al hoy día, diremos que no te dejes engañar con el “cambio” de la derecha, el cual pretende acabar con el proceso de inclusión social.- TOMADO DE: http://ciudadccs.info/
