Jóvenes científicos venezolanos salvan vidas de neonatos en medio del bloqueo económico
El bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos (EEUU) contra Venezuela ha traído como consecuencia que mermen los ingresos en divisas al país y se limiten las transacciones financieras, afectando, entre otras cosas, el acceso a equipos e insumos médicos para atender a la población venezolana.
Ante las dificultades presentadas, un grupo de jóvenes científicos venezolanos asumieron la tarea de buscar alternativas, y emplearon todos sus conocimientos para enfrentarse a lo que para ellos era un trabajo desconocido: reparar equipos médicos.
Durante una reunión con científicos celebrada a finales del año 2018, el gobernador del estado Miranda, Héctor Rodríguez, expuso los principales problemas que afrontaban los centros de atención neonatal, entre ellos, el deterioro de las incubadoras, lo que suponía una inversión en dólares para su recuperación.
En respuesta, la presidenta de la Fundación Centro Nacional de Desarrollo e Investigación en Telecomunicaciones (Cendit), Gloria Carvalho Kassar, propuso: «Mándanos unas incubadoras, peor no pueden quedar».
En entrevista a RT, la presidenta recordó que «En esa ocasión le dijimos: ‘Somos muy buenos en electrónica pero no sabemos nada de equipos médicos'», pese a ello, tomaron el reto y repararon las incubadoras diez días después de recibirlas.
El proyecto de recuperación de equipos médicos que sostiene la fundación no se limita a la reparación de incubadoras. También se encargan de cervocunas, lámparas de fototerapia, autoclaves o esterilizadores, nebulizadores, electrocardiogramas, monitores multiparámetros, hornos y centrífugas (utilizadas en los laboratorios clínicos), contó la ingeniera Carlelinés Gavidia, quien dirige la Unidad de Electrónica de Comunicaciones.
Proceso de capacitación
Para emprender las labores de reparación, los trabajadores tuvieron que estudiar los manuales de los equipos, verificar su calibración y funcionamiento y determinar los puntos críticos para lograr el reemplazo de las piezas, señaló Francisco Ortiz, trabajador de Industrias Canaima, empresa que participa en el proyecto.
Para enfrentarse a lo desconocido han tenido que investigar el significado de cada símbolo y cómo se relacionan las piezas. En los casos en los que no disponían de información del equipo consultaban con un doctor o especialista para que les explicara el procedimiento.
Sin embargo, la parte más difícil ha sido la sustitución de las piezas. «Si no tenemos los componentes, ahí viene el verdadero trabajo, porque tenemos que buscar uno que pueda sustituirlo y que se consiga en Venezuela. Hemos tenido suerte», explica el ingeniero mecánico Orlando Villarroel, coordinador de la unidad de Diseño Mecánico del Cendit.
Tan loable labor inició en septiembre del año 2018. Desde entonces, los jóvenes ciéntificos han logrado mejorar su habilidad para detectar fallas y reparar los aparatos, logrando hallar la solución en menos tiempo.
En el proyecto participan al menos 80 personas, entre trabajadores del Cendit y Canaima.
Cumpliendo el compromiso
Los tecnólogos han trasladado su trabajo a diversos hospitales, donde han podido observar de primera mano los frutos de su esfuerzo.
«Sentimos que ha valido la pena porque le damos vida a una persona que lo necesita, el hecho de que un bebé nazca y necesite una incubadora es porque no nació a término», comentó Gavidia al canal ruso.
Entre los logros del equipo se cuenta la refacción de 187 dispositivos en la Maternidad Concepción Palacios, entre incubadoras, monitores multiparámetros, bombas de infusión (encargadas de inyectar fluidos, medicación o nutrientes en el sistema circulatorio del paciente).
Además, han realizado reparaciones en hospitales de zonas periféricas del estado Miranda como el Victorino Santaella, en Los Teques; Ernesto Regener, en Río Chico; Hermógenes Rivero Saldivia, en Caucagua y la Maternidad Cirila Villegas, en Tacarigua de Mamporal.
El equipo estima poder movilizarse al interior del país y cumplir su promesa, pues el compromiso es: «Antes de que termine este año, no habrá una incubadora fuera de servicio en Venezuela».
AVN
No hay comentarios:
Publicar un comentario