jueves, 21 de abril de 2016

¿Dónde están Marx y Lenin ahora 

que los necesitamos?


revisionismomarxista
Lenin, la guerra civil, Leninismo/marxismo

por Paul Craig Roberts
CounterPunch

Traducido del inglés para Rebelión por Sinfo Fernández 

.

Marx y Lenin iban por delante de su tiempo. Marx escribió antes que nadie sobre 

la externalización de los puestos de trabajo y la financiarización de la economía. 

Lenin presidió una revolución comunista que se adelantó al tener lugar en un país

 en el que los elementos feudales predominaban aún sobre el capitalismo. 


En el siglo XXI, el capitalismo estadounidense se ha liberado de las regulaciones

 que lo democratizaban y hacían que estuviera al servicio de la sociedad. 

Hoy en día el capitalismo se ha financiarizado con la consecuencia de que se ha

 vaciado de su poder de producción al servicio de la deuda.


Cuando yo era joven, un tipo con un millón de dólares era alguien muy rico. 

Cualquiera que tuviera unos pocos millones era considerado más rico que los 

ricos. En estos momentos, hay gente en posesión de miles de millones de dólares.


Pocos de ellos han ganado sus miles de millones produciendo bienes y servicios 

vendidos a los consumidores.


Los economistas neoliberales que prescriben la política económica no sólo en 

Occidente sino también en Rusia y China, afirman erróneamente que el dinero 

recibido es dinero ganado. De hecho, ¿cómo consiguieron realmente los de 

Menos-del-Uno-Por-Cien sus miles de millones?


Los consiguieron a través de conexiones políticas y mediante transacciones 

puramente financieras.


Cuando la Unión Soviética se desmoronó como resultado de que los comunistas 

de línea dura arrestaran al presidente Gorbachev, individuos con buenas 

conexiones en Rusia y en la provincia soviética de Ucrania, especialmente los que

 estaban bien relacionados con Washington e Israel, se quedaron con los enormes

 grupos de empresas que anteriormente eran propiedad del Estado.


En EEUU, los multimillonarios son el resultado de los préstamos bancarios para 

las adquisiciones apalancadas de empresas. Las adquisiciones proporcionan 

riquezas al adquiriente recortando las jubilaciones de la compañía y utilizando el 

efectivo de la misma para amortizar el préstamo de la adquisición. A menudo, la 

compañía y sus empleados se arruinan mientras el tiburón se larga con cantidades

 inmensas de dinero. La manipulación de la oferta pública inicial es otra fuente de

 riqueza, al igual que los derivados titularizados.


Los economistas clásicos, y Michael Hudson hoy, definen estos beneficios como

 “rentas económicas”, y se obtienen sin aumento alguno de la producción real. 

Es decir, las ganancias de esos multimillonarios son una forma de parasitismo 

basada en la explotación y no en la creación de una producción real.

 Las ganancias son consecuencia de la reducción de los ingresos de la producción

 al servicio de la deuda.


Las economías capitalistas actuales son mucho más disfuncionales de lo que 

Marx suponía. Durante las últimas dos décadas, las economía occidentales no han

 estado al servicio más que de los muy ricos, y las masas explotadas se han 

sometido a su explotación. También en Occidente la gente puede ser esclava.


No hay ninguna razón para que una persona tenga miles de millones de dólares. 


El dinero eleva el poder político de determinados tipos por encima del poder del

 electorado. De hecho, el dinero se convierte en el electorado. 

El dinero se utiliza para comprar control político y eso destruye a un gobierno que

 sea representativo. Multimillonarios como Sheldon Adelson, George Soros y los 

hermanos Koch utilizan sus fortunas multimillonarias para controlar al gobierno 

estadounidense en aras a sus intereses. Que el Tribunal Supremo sea republicano

 les ha facilitado bastante las cosas.


El aumento del poder financiero en Rusia y China ha creado centros de poder 

privado en esos países que, al igual de los existentes en EE.UU., son independientes

 de los gobiernos. 

Esos centros de poder tienen potencial para capturar a los gobiernos y utilizar las

 instituciones públicas para concentrar aún más la riqueza en pocas manos. 

Las privatizaciones en Rusia y China reforzarán el poder independiente de los 

estrechos intereses privados existentes en Europa y el Reino Unido. Las economías

 neoliberales garantizan que, finalmente, el dinero controle a los gobiernos.


Oxfam, una organización benéfica internacional con sede en Oxford, Inglaterra, 

informa que 62 multimillonarios poseen la mitad de la riqueza del mundo.


Fue Warren Buffett, uno de los megamultimillonarios más ricos, quien dijo que la 

tasa de impuestos que pagaba su secretaria era más alta que la suya. Si los 

gobiernos no rectifican esta situación, la revolución lo hará.


Pero, según parece, no harán tal los votantes, al menos no en EE.UU. Hillary 

representa al Uno Por Cien, como atestiguan los 153 millones de dólares en

 honorarios como oradora, pero el 99% restante son autodestructivos al votar en 

apoyo de las ambiciones de Hillary para conseguir la presidencia. 

Al parecer, H.L. Mencken tenía razón, la inmensa mayoría de los estadounidenses

 son imbéciles.


Paul Craig Roberts fue secretario adjunto del Tesoro de EEUU. Y editor asociado del 

Wall Street Journal. Su ultimo libro es The Neoconservative Threat to World Order.


Fuente: 

http://www.counterpunch.org/2016/04/11/where-are-marx-and-lenin-when-we-need-

them/

Esta traducción puede reproducirse libremente a condición de respetar su 

integridad y mencionar al autor, a la traductora y a Rebelión como fuente de la 

misma.    

        

Marx y Engels fueron los primeros en dilucidar en sus obras científicas que el socialismo no es una invención de soñadores, sino la meta y el resultado ineluctable del desarrollo de las fuerzas productivas en la sociedad contemporánea. Toda la historia escrita ha sido hasta ahora la historia de la lucha de clases, la sucesión del dominio y las victorias de unas clases sociales sobre otras. (Lenin)

TOMADO DEhttp://noticiasuruguayas.blogspot.com/

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