Puerto Portete, madriguera de ‘bachaqueros’ y vía que desangra la economía de Venezuela

“Puerto Nuevo”, en la bahía de Portete, Alta Guajira.

En la localidad de Puerto Nuevo, cerca de la bahía de Portete, Alta Guajira, las organizaciones del contrabando y el paramilitarismo, manejan su propio puerto. “El cierre de la frontera por Venezuela no se justifica”, dijo el presidente Juan Manuel Santos, pero omite que el territorio colombiano es una “zona gris” donde, con ‘accionistas’ de casi todo el continente, se manejan los negocios más lucrativos del crimen organizado.

Sobre el estado de excepción en la frontera con Colombia:

El rústico desembarcadero de puerto Nuevo, operado por una empresa de ‘guajiros ricos’, denominada Pensoport S.A.- que maneja como esclavos a su personal wayuu- es tolerado por la DIAN de Colombia (Aduanas e Impuestos Nacionales).

En las ciudades de Maicao, Riohacha y Valledupar (Guajira y César), 48 personas han adquirido grandes propiedades, producto del contrabando de combustible, alimentos y otras mercancías provenientes de Venezuela.

Camino de desertores

Según datos oficiales de Migración Colombia, “720 cubanos han ingresado – de manera irregular, en lo que va del año, por la frontera de Cúcuta- tras desertar en Venezuela”. Los médicos reclaman en Bogotá visado a EE.UU.

Carros de combate

Los blindados- reporta la agencia inglesa Reuters- tienen capacidad para transportar 11 soldados equipados, cuentan con un sistema digital de control remoto para accionar armamento desde su interior, así como con un moderno sistema antiminas y de absorción de explosiones.

Antes de su viaje a EE.UU. para asumir la Embajada de Colombia, Juan Carlos Pinzón, ministro de Defensa, anunció que el material se encuentra bajo control de la Fuerza de Tarea de Armas Combinadas Medianas del Ejército, acantonado en una unidad, ubicada cerca del municipio de Distracción, al sur del departamento de La Guajira, en la frontera con Venezuela.

Antecedentes

Como hecho histórico y trascendente, Puerto Portete fue escenario de un suceso que marcó la vida de los wayuu colombianos. El 16 de abril de 2004, paramilitares del bloque Contrainsurgencia Wayuu, al mando de Rodrigo Tovar Pupo, alias “Jorge 40”, masacraron a doce indígenas. A la sazón, unos 600 indígenas huyeron a Venezuela.

SR

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