Balance de la cooperación rusa e injerencia de EE.UU. en
Siria
Publicado 22 marzo 2017
Siria es víctima desde 2011 de una ofensiva financiada por Estados Unidos y aliados occidentales cuyo objetivo es el derrocamiento del presidente Bashar al Assad. | Foto: EFE
Desde el estallido de la guerra en 2011 Siria se convirtió en un escenario dramático. Estados Unidos y Rusia, ambos con sus aliados e intereses, se involucraron en esta guerra contra el terrorismo.
El Departamento de Estados de Estados Unidos convocó a los miembros de la coalición militar contra el autodenominado Estado Islámico (Daesh, en árabe) y el yihadismo, a una reunión para abordar estrategias de luchas contra el grupo terrorista insurgente.
Washington es el lugar de encuentro y, según el programa, se desarrollará además otros encuentros destinados a buscar soluciones para combatir la propaganda y fuentes de financiación del grupo yihadista, así como medidas de estabilización para el futuro de las zonas que han estado bajo control del EI.
A la cita asistirían 68 países y organizaciones regionales entre los que se encuentran miembros de la OTAN, países del norte de África y Oriente Medio. Rusia no está convocada para abordar estrategias de lucha contra el terrorismo en Siria.
En opinión del analista internacional Basem Tajaldini la posición que adopta Estados Unidos en no permitir la participación de Rusia en esta reunión ministerial sobre combates contra el terrorismo ratifica la doble moral de ese gobierno y su hipocresía ante la lucha contra el Daesh.
Cooperación militar de Rusia en Siria
La cooperación militar de Rusia ha resultado efectiva y eficiente en el terreno de combate, garantizando el mando de operaciones estratégicas en estrecha coordinación con Siria.
Rusia y su aliados (Irán y China) participan en la guerra contra el terrorismo y la oposición siria por solicitud del Gobierno de Bashar al Assad desde septiembre de 2015, sobre la base de todos los requisitos legales y jurídicos y como parte de los nexos bilaterales entre los dos países.
En ese sentido, Tajaldini resaltó que desde que Rusia ejecutó las acciones militares en territorio sirio, con sus fuerzas aeroespaciales, Siria ha podido enfrentar exitosamente a los grupos de oposición y al Daesh.
La cooperación ha sido genuinamente apegada al derecho internacional porque la lucha contra el terrorismo es sin diferenciación, lo cual ha resultado en una operación efectiva que propinó cuantiosos daños a la infraestructura militar de Daesh, agregó Tajaldini.
Intervención de Estados Unidos
El Gobierno estadounidense con sus aliados de Francia, Gran Bretaña, Arabia Saudí, entre otros, no dejó de apoyar a los movimientos contrarrevolucionarios o terroristas que luchan contra gobiernos soberanos, en este caso a la oposición siria.
Los resultados de la intervención estadounidense en Siria ha sido desastrosa, calificó Basem Tajaldini, sus blancos especialmente han sido muy errados, por lo que consideró que EE.UU. no lidera una verdadera lucha contra el terrorismo en Siria.
La intervención militar ha afectado generalmente a la población civil y ha causado daños a la infraestructura del país. A esto se suma el doble rasero de torpedear de manera insistente toda negociación en pro de la paz.
Tahaldini especificó que Estados Unidos es el gran responsable de que existan esos grupos terroristas en el Medio Oriente. En su supuesta lucha contra el Daesh, hace diferenciación y los cataloga como moderados y esta posición es los que ha permitido el fortalecimiento de estos grupos armados contra el Gobierno de Bashar al Assad.
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